Lo Mejor de Retos Femeninos - Agosto 2021
6 Otra vertiente se encuentra en el respeto que nos merece la elección de la sexualidad, más aún cuando, en el caso de las mujeres, se crean estigmas con rapidez. Si elige la soltería, no tener hijos o cualquier otra aventura que defina su derecho individual e incluso íntimo para hacerlo, debe tener nuestro respeto. Somos libres de elegir qué hacer con nuestro cuerpo y no debemos admitir el jucio contra nosotras: “¿Por qué estás conectada tan tarde?” o ¿Con quien hablas? son formas sutiles pero muy nítidas de perpetuar el sometimiento. La solidaridad de género, desde luego, implica no agredirnos y alentar aquellos derechos, aunque sea recurrente que entre nosotras nos critiquemos por la forma de vestir, hablar, e incluso cuando asociamos que si alguien asumió una responsabilidad relevante en el área pública o privada es porque incurrió en actividades ilícitas en términos éticos o morales. Los famosos favores sexuales, vaya: “Ah, claro, seguramente se acostó con el jefe”, entre otros decires que perpetuan la violencia de género. Por todo ello es fundamental que las mujeres nos percibamos como entes iguales y estemos dispuestas a apoyarnos para cambiar, poco a poco, la realidad que nos oprime. Cuando aceptamos, por indolencia o porque nos sumamos a las críticas, que una mujer sea agredida, estamos aceptando que nos agredan a nosotras mismas. Nos debilitamos. Pequeñas acciones solidarias y cotidianas nos fortalecen y permitirán una mejor convivencia social.
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy MTUxNjQ2