25 al enemigo. La palabra amigo viene de la palabra “amistad”, “amor”. El amor es la esencia del ser humano. El amor en la práctica es cuidar. El amor es confianza. El amor es responsabilidad. El amor es respeto. El amor es conectar, el amor es paz. Y puedo seguir enumerando lo que realmente es el amor, sin embargo, no lo vamos a comprender fácilmente cuando estamos acostumbrados a ver el amor con sufrimiento, con condiciones, con expectativas, con miedo, con dolor, con obligación. En lo personal, no me gusta ponerme de ejemplo, porque cada ser humano tiene su propia vida, sus propias creencias y experiencias; sin embargo yo puedo jactarme que yo soy amiga de mi hija, y siempre lo he sido, y estoy muy satisfecha del comportamiento y de la vida de mi hija. Yo no creo en el sistema de obediencia ni en ser una autoridad para mi hija, y nunca lo he sido. Mi hija fue educada sin reglas ni obligaciones, ah, y ni premios ni castigos. Comprendo perfectamente que al escuchar esto salgan miles de excusas y razones para no creerlo o ni siquiera tener curiosidad de saber cómo se hace eso. Yo nunca he creído en las autoridades ni en las disciplinas impuestas, por eso para mí es algo normal, pensar de esa manera. ¿Por qué te da miedo ser un verdadero amigo(a) para tu hijo(a)? ¿Porque crees que te va a perder el respeto? Un respeto ganado a través del miedo y no del amor. Si eres amigo de tu hijo, ¿pierdes Autoridad con él? Conozco cientos de padres de familia que aun no siendo amigos de sus hijos ya perdieron la autoridad con sus hijos, y lo que usan es la violencia. ¿Has tenido que usar la violencia para que tus hijos te “respeten”? El sistema que yo he usado yo lo llamo Sistema de Poder, y está basado en la responsabilidad, la confianza y la paz (amor). Yo practico la responsabilidad en mi vida diaria, y es por eso que para mi hija fue fácil ser responsable. Ella aprendió desde muy niña que sus decisiones eran y son importantes, por lo tanto, su vida depende de ella y no de nadie más. Yo confío completamente en mi hija y ella confía en mí; ella sabe que mi confianza hacia ella no depende de su comportamiento ni de nada. Yo no creo que la confianza se gana, yo creo que la confianza se trabaja todos los días a través de la conexión que tenemos ella y yo. Educar en la paz no es tan sencillo en un mundo tan aprisa, inconsciente y tan violento. Estamos acostumbrados a ordenar y a obedecer; los hijos “buenos” obedecen sin siquiera pensar. La mayoría de los padres de familia no permiten o no les gusta que sus hijos cuestionen. Te has preguntado ,¿por qué te cuesta tanto trabajo elegir y decidir lo que quieres en tu vida?, ¿por qué terminas haciendo lo que los demás quieren y resignándote a vivir una vida que no te gusta? Exactamente por eso, porque solo te enseñaron a obedecer y no a pensar por ti mismo, seguramente eso es lo que quieres para tus hijos, que vivan una vida decidida por los demás, empezando por lo que decidieron los papás para ellos. En la actualidad lo que realmente necesita un ser humano es un amigo, sí, un amigo que lo escuche, que no lo juzgue, que no lo critique, que no lo regañe, que no le imponga cosas y que no decida por él. Una persona que nos abrace y que nos ame puramente. Todos requerimos de una persona que pueda saber hasta lo que pensamos y sentimos, y que podamos sentirnos bien con eso; y esa persona debería ser nuestra madre (por supuesto el padre también) por la conexión que hay con ella. Estamos desaprovechando la gran oportunidad de ser amigos de nuestros hijos y empezar a cambiar las bases de la sociedad por nuestra programación, ignorancia y miedos. Este sistema nos ha programado para ser enemigos de nuestros hijos en lugar de ser amigos, porque la familia es la base de la sociedad y es ahí donde se ejercen los primeros síntomas y programas de violencia al usar el Sistema de Control de Autoridades y Obediencia. ¿Hasta cuando mi querido padre de familia, hasta cuándo vas a evitar conectar con tu hijos desde el amor puro?
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