26 Gabriela Cruz Tornero www.gabycruzcoach.com Los estragos del burnout ¿No tienes horario fijo en el trabajo?, ¿permaneces más de ocho horas en tu espacio laboral?, ¿te dan cargas de trabajo mucho mayores a las que humanamente puedes atender?, ¿careces de reconocimiento a tus logros por parte de tu jefe?, ¿se percibe un ambiente de tensión constante en la organización para la que trabajas? ¡Cuidado! Puedes estar viviendo estrés crónico y al borde del burnout. Herbert Freudenberger, psiquiatra norteamericano, acuñó el término de burnout en 1974, para referirse al agotamiento que los trabajadores experimentaban, después de cierto tiempo de trabajar para una misma empresa, debido a la falta de motivación, a la pérdida de entusiasmo y a un salario que no satisfacía todas sus necesidades. Más tarde, la psicóloga Chistina Maslach precisó la perspectiva del trabajador exhausto, nombrándole “Síndrome de agotamiento emocional”, caracterizado por un sentimiento de despersonalización y reducida realización personal asociada al trabajo. Desde 2022, la Organización Mundial de la Salud (OMS) oficializó a este síndrome como una enfermedad de trabajo, que resulta de un estrés crónico. En la clasificación de la OMS, el burnout tiene tres dimensiones: 1. Sentimientos de falta de energía o agotamiento. Sentirse constantemente con cansancio, incluso al iniciar el día. 2. Aumento de la distancia mental con respecto al trabajo o sentimientos negativos o cínicos, también con respecto al trabajo. Es decir, no sentir compromiso con las propias actividades
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